La radiofrecuencia como inductor del colágeno

El colágeno es una fibra básica de nuestro organismo que soporta la estructura de la piel. Con el paso del tiempo, el colágeno que producimos disminuye o se deteriora por los efectos del sol y de otros factores.
Para ayudar a la producción y regeneración de esta sustancia esencial para nuestra piel, la radiofrecuencia, mediante la aplicación de ondas electromagnéticas de alta frecuencia sobre la piel, provoca el calentamiento controlado de las diferentes capas de la dermis, lo que favorece la circulación de la piel y el tejido subcutáneo y la formación de nuevo colágeno.
Cómo funciona la radiofrecuencia
La radiofrecuencia no es un tratamiento nuevo, pero ha evolucionado de forma considerable a lo largo de los años. La tecnología actual es uno de los métodos más innovadores y demandados por los pacientes para tratar la flacidez de la piel.
El término radiofrecuencia se refiere a la energía térmica que se suministra a la piel para calentar el tejido subyacente y causar una quemadura controlada. Esto desencadena el proceso en el cuerpo que provoca una producción de los componentes estructurales naturales de la piel como el colágeno, además de la elastina y el ácido hialurónico.
Una vez que la zona donde se ha aplicado radiofrecuencia “se cura”, el resultado es una piel más tensa, firme y elevada. La radiofrecuencia, además de para rejuvenecer el rostro puede emplearse en el resto cuerpo gracias a su capacidad para tensar la piel y ayudar a reducir la grasa y la celulitis.
Radiofrecuencia corporal
Consiste en transmitir calor a la piel aumentando la temperatura interna aproximadamente hasta los 40ºC. Esta temperatura consigue reducir la grasa acumulada gracias a que el calor rompe las células de la grasa haciendo que estas se diluyan en el organismo y sean eliminadas por vías naturales. El calor también estimula la producción de colágeno y elastina de forma natural.
La radiofrecuencia corporal es una técnica idónea por ejemplo para corregir la flacidez producida en el postparto o las producidas por dietas de adelgazamiento, así como también para mujeres maduras con la piel menos elástica o zonas que tienden a caer, como la cara interna de los brazos o de los muslos.
Radiofrecuencia facial
La radiofrecuencia aplicada al rostro actúa sobre la piel facial para activar los procesos naturales de regeneración de colágeno y aumentar la circulación sanguínea, que la mantienen firme y oxigenada.
Mejora la calidad de los tejidos y la elasticidad de la piel, corrigiendo líneas de expresión y devolviendo los niveles de hidratación que se han perdido por el paso del tiempo.
La radiofrecuencia facial se ha convertido en uno de los tratamientos más demandados en las clínicas de medicina estética, entre otros motivos, porque es un tratamiento no invasivo que combate la flacidez, elimina las arrugas y consigue un efecto flash aportando además una gran luminosidad. Es una técnica segura, sencilla, que no precisa agujas ni inyecciones, tampoco se introduce ninguna sustancia externa, y sus efectos secundarios son muy infrecuentes.
Resultados
El efecto inmediato de la aplicación de radiofrecuencia en el organismo es la reparación del colágeno. Después de varias sesiones, se llega a lograr una reestructuración del colágeno profundo y la formación de nuevas fibras.
Los efectos son visibles, de forma habitual, a partir del mes de tratamiento y mejoran en los siguientes, aunque esto dependerá del estado del colágeno de cada paciente. Se necesitarán entre seis y diez sesiones, en función de la superficie corporal a tratar y, su frecuencia al inicio del tratamiento variará en función del deterioro de la piel, pudiendo ser de hasta dos sesiones semanales si fuese necesario. Posteriormente y como tratamiento de mantenimiento, las sesiones pueden espaciarse de manera que puede realizarse solo una sesión mensual de recuerdo.
Al terminar cada sesión de radiofrecuencia es normal que la piel presente un pequeño enrojecimiento, que desaparece al poco tiempo.
Indicaciones de la radiofrecuencia
La radiofrecuencia está indicada para todo tipo de pieles, tanto de mujeres como hombres, a partir de los 35 años. No obstante, cada vez hay pacientes más jóvenes que se someten a este tratamiento para aumentar sus reservas de colágeno.
Se trata de una técnica muy segura, aunque, por prevención, tiene algunas contraindicaciones. No se recomienda en el caso de embarazo y lactancia, o de padecer algunos tipos de cardiopatías, alteraciones de la coagulación, cuperosis, enfermedades neuromusculares, implantes recientes de colágeno, o tener alguna prótesis metálica, marcapasos u obesidad mórbida.
Tratamientos precursores del colágeno en Madrid
Como en cualquier tratamiento médico estético, es fundamental tener un diagnóstico previo y asesoramiento por parte de un profesional con amplios conocimientos y experiencia para poder realizar el tratamiento con total seguridad con los mejores resultados posibles.
En Alluring Clinic ofrecemos un asesoramiento personalizado sobre el tratamiento de radiofrecuencia como inductor de colágeno a cada paciente, así como de cualquier otro tratamiento de los que realizamos en nuestra Clínica de medicina estética en Madrid.
En una primera consulta informativa gratuita, analizaremos tu caso para identificar el mejor tratamiento para tu situación y podremos asesorarte acerca de la mejor aproximación a tus necesidades con diferentes protocolos de inducción de colágeno con radiofrecuencia o combinando con otras técnicas con inductores de colágeno.